La calefacción se lleva casi la mitad de energía de lo que consume la casa. Y el bolsillo se resiente. Así de rotundo lo exponen las organizaciones de consumidores, que en esta época invernal ofrecen consejos sencillos para mantener una temperatura adecuada en la vivienda sin coste excesivo, apelando a la “eficiencia energética”. Antonio López es el director de Comunicación de la Confederación de Consumidores y Usuarios de Madrid.
Los expertos sugieren hacer pequeñas mejoras en el hogar, como un mayor aislamiento con doble cristal en las ventanas o la instalación de un termostato. Además, se pueden aprovechar las subvenciones y ayudas de cada región para reducir el gasto energético. Pero en el día a día, es importante programar la temperatura con un termostato, aunque cueste cerca de 200 euros, ya que es un beneficio a la larga y se ahorra hasta un 8% de energía por cada grado. También existe la opción de instalar válvulas termostáticas en algunos radiadores. Y a la hora de elegir, desde la Organización de Consumidores y Usuarios proponen la caldera de gas, que es más económica que apostar por una caldera de gasóleo o eléctrica. Y otro clásico entre los vecinos: ¿cuál es la temperatura ideal? En invierno, la más saludable para el hogar es de 20ºC en vez de cifras superiores a los 23ºC. Como dato, se dice que la factura puede caer un 13% si de noche bajamos el termostato de 20ºC a 16ºC, de modo que la media de 750 euros en calefacción de gas natural para un piso se reduciría en casi 100 euros al año. ¿Y cómo es mejor para los consumidores, si la calefacción es comunitaria o particular? Antonio López, de la CECU.
Y este asunto tiene otra cara, la de los timos frecuentes de supuestas compañías u operarios dudosos:
¿Y qué opinan desde colectivos ecologistas? ¿Es mejor la caldera de carbón, el gas natural, la electricidad, el gasoil, las placas solares? ¿Hacia dónde vamos? Hablamos con un especialista entusiasta en materia energética, que indica cómo la energía fotovoltaica produce electricidad a través de las placas solares, cuyo precio ha bajado de forma muy acentuada y la eficacia en España es evidente por las horas de luz que disfrutamos. Carlos Cézar, de Ecologistas en Acción, es gerente de la empresa de ingeniería y sistemas renovables Enersun y apela al “sentido común” entre instituciones, compañías y usuarios.
Como consejos básicos, todos coinciden en el aislamiento óptimo y el mantenimiento de una temperatura constante, ya que apagar y encender la caldera gasta más; desde la OCU también apuntan que una buena instalación permite optimizar el consumo y ahorrar hasta 400 euros anuales, igual que contratar la potencia adecuada en la vivienda supone otra reducción de la factura. En Enersun recomiendan un estudio particular para cada piso o comunidad de propietarios, afirman que son más efectivos los aparatos que trabajan a menor temperatura, así como centralizar la calefacción. Y, por supuesto, aunque la amortización no sea inmediata, proponen soluciones más sostenibles para respetar el medio ambiente.
Cada cual tiene sus trucos y el mercado, con sus virtudes y defectos, es muy amplio y da lugar a debates peliagudos. Recordemos que la energía utilizada en los hogares para calefacción y agua caliente sanitaria supone el 10% del total de consumo energético en todo el país y podría reducirse notablemente con innovación industrial y consejos prácticos como los que hemos recabado en la Cadena SER. Feliz (y cálido) invierno.
Comentarios