La artista abstracta Álvarez-Laviada desdibuja el realismo en el CEART de Fuenlabrada.
Con el tiempo ha ido perfeccionando su concepción de lo abstracto. Se formó en la Universidad de Vigo y, hoy, ha encontrado la inspiración en Madrid. La artista Irma Álvarez-Laviada ha desarrollado todo un estilo dentro del género pictórico.
Una filosofía en la que se aprecia una corrección del realismo con una clara tendencia hacia la abstracción, y en la que lo más interesante resulta descubrir los componentes artísticos ocultos en los vacíos del lienzo.
De este modo, cada obra se presenta como un ecosistema pictórico independiente en el que no hay que buscar un significado en su contenido sino, más bien, descubrir el significante de su continente.
Descubrimos así, en la obra de Álvarez-Laviada, el uso del trazo fragmentado, la línea geométrica y del intervalo de formas. Todo ello siguiendo un patrón neoplasticista y en el que se permite ciertas técnicas expresionistas como el dripping o el goteo.
Todo ello queda recogida en la exposición “Campos de color”, que acoge el Centro de Artes Tomás y Valiente, en su Sala C Roja hasta el 10 de junio.
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