“Mi pecado es terrible; quise llenar de estrellas el corazón del hombre”. Con estas irónicas palabras el poeta Marcos Ana alude no sólo a su caso, 23 años encarcelado y condenado a dos penas de muerte durante el franquismo, sino a los de toda una generación de personas que sufrieron por defender sus ideas.
Marcos Ana ha condensado todas sus vivencias en la autobiografía “Decidme cómo es un árbol”, que se ha presentado en el teatro Nuria Espert de Loranca gracias al Ateneo republicano de la ciudad. En este libro se recogen las multitudinarias recepciones en países como Argentina, Chile o Brasil tras su liberación, su reconocimiento por instituciones como Amnistía Internacional, la UNESCO o la Universidad de Oxford, y su relación con personalidades como Picasso, Alberti o Neruda.
Tras pasar 23 años de tortura y cárcel, en la actualidad Marcos Ana no ve su experiencia como una pesadilla, más bien como un gran aprendizaje.
Una vida apasionante que pronto podremos ver trasladada a la gran pantalla, ya que el gran Pedro Almodóvar ha adquirido los derechos de este “Decidme cómo es un árbol” para realizar una película.
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