Las ordenanzas, aprobadas por el grupo municipal del Partido Popular que gobierna en mayoría, recogen una congelación o rebaja de la mayoría de las ordenanzas, por lo que el concejal de Hacienda y primer teniente de alcalde, Javier Hernández, ha señalado que “el objetivo primordial de la bajada de impuestos municipales para 2014 es ayudar a salir de la crisis, facilitar la recuperación económica y por consiguiente generar la suficiente confianza que impulse el empleo en nuestra localidad”.
En lo referente al IBI, el gobierno aprueba rebajar el tipo de gravamen al 0,608, nivel similar al que tenía la ciudad en 2007, para “compensar tanto el incremento de un 10 por ciento que supone la revisión catastral y la subida obligatoria impuesta en 2011 por el Gobierno del 0,4 por ciento”.
La tasa de basuras también tiene cambios, aunque se mantiene en los 90 euros para todas las viviendas independientemente del número de habitantes. A pesar de la congelación del impuesto, se ha aprobado una bonificación del 50 por ciento a los vecinos jubilados, parados de larga duración, pensionistas y a las familias que no alcancen 1,5 veces el salario mínimo interprofesional por ingreso individual.
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