En la jornada ha intervenido un ingeniero de telecomunicaciones que ha señalado que las frecuencias de radio, televisión y wi-fi, no son extremadamente diferentes a las frecuencias de telefonía móvil, remarcando que desde los años 50 convivimos en las ciudades de manera amigable con los campos electromagnéticos.
Además, ha señalado que cuanto mayor es el número de antenas menor es la potencia que éstas necesitan para cubrir un territorio.
La jornada se ha completado con la exposición de un experto en salud pública que se ha centrado en la inexistencia de evidencias científicas sobre el efecto nocivo para la salud de los campos electromagnéticos, tal y como están actualmente regulados.
Comentarios
PLATAFORMA DE AFECTADOS POR LAS ANTENAS DE TELEFONÍA MÓVIL DE CANARIAS dice:
El Sr,. Vargas estuvo en Tenerife y salió mal parado por las contestaciones que le hicieron los representantes vecinales a sus teorías sobre la inocuidad de las radiaciones electromagnéticas.
Por ello tanto la OMS como el Parlamento Europeo han reconocido su perjuicio sobre la salud y la posible apración de tumores cancerígenos,
Al parecer el Sr Vargas está muy agradecido a las operadoradoras.
¡Por algo será!
jueves, 24 de noviembre de 2011 a las 17:04
Joan Carles López Sancho dice:
No si ahora resultara que son inocuas.....Lo primero que se se tendría que hacer es obligar a las compañias, a que si quieren trabajar que compartan antenas entre los distintos operadores, y no que haya diferentes anteanas de compañias para el mismo lugar, al final se reduciría mucho la contaminación, más antenas pero de muchísima menos radiación que las que hay ahora, las cuales se hacen para cubrir los dichos puntos negros o de sin cobertura, y por la orografia del terreno, y puestas en edificios donde no vivan personas en radio de 700 metros, o cuadrangular las antenas para irradiar desde fuera del casco urbano y asi llegar poca radiación en la zona poblada. y por fin lo más locuaz es sentarse en una misma mesa las diferentes partes pero parsa reprocharse problemas sino para buscar una solución de una vez por todas. El 31 de mayo de 2011, la OMS / Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC) clasificó los campos electromagnéticos de radiofrecuencia como posiblemente cancerígeno para humanos (Grupo 2B), en base a un mayor riesgo de glioma, un tipo maligno de cerebro cáncer1, asociados con la tecnología inalámbrica uso del teléfono. Esto es consecuencia de la clasificación de los campos electromagnéticos de frecuencia extremadamente baja en 2002 por la OMS / Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC) como posible cancerígeno para los seres humanos (Grupo 2B) basados en un vínculo entre la leucemia infantil y las líneas eléctricas. Estas determinaciones van cambiar el debate de si los campos electromagnéticos artificiales son seguros “,y ayer publique el nuevo estudio esta vez viene de Ucrania que existe una verdadera relación entre ondas de radiofrecuencia y cáncer más información en
http://www.gigahertz.es/estudios__de_telefonia_inalambrica.html
sábado, 26 de noviembre de 2011 a las 06:47