El alcalde de Fuenlabrada dice que vive esta situación con “calma tensa y cabeza fría”, “preocupado”, pero a la espera de conocer la decisión del juez para tomar las medidas oportunas. Para ello, ha asegurado estar en contacto directo con el Secretario General de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, con quien coincide en cómo abordar el tema, siempre teniendo presente la presunción de inocencia.
Manuel Robles ha querido mostrar una vez más prudencia por la envergadura de las acusaciones, aunque ha asegurado que “las formas de vida de Borras eran muy normales”.
Respecto a posibles presiones en este caso por parte del PSM, Robles desmiente este término y habla de total sintonía con la organización regional. Ambos, asegura, están a la espera de lo que determine la justicia para tomar la decisión oportuna, pero “sin ninguna presión” ni de la ejecutiva regional ni de Tomás Gómez.
Sobre la relación con el empresario chino detenido, presunto cabecilla de la trama, Gao Ping, el regidor ha afirmado que lleva varios años sin verle, salvo alguna coincidencia puntual en algún acto con otras personalidades. Ha precisado también que el viaje que realizó a China y en el que coincidió con él, fue organizado por la Embajada de este país en España y se hizo junto con un grupo de empresarios fuenlabreños y también chinos, entre los que estaba Gao Ping. “Estuvo dentro de la normalidad institucional”, un viaje, en el que el alcalde, asegura, tuvo una agenda muy apretada, con más de 18 reuniones con empresarios del país para vender las posibilidades de inversión en su ciudad. Reconoce que si hubiera sabido de las actividades de esta persona, no habría tenido ningún contacto con él y ha recordado como este empresario chino se ha fotografiado también con otros personajes públicos, como el Rey don Juan Carlos, sin que nadie supiera de su trayectoria.
El abogado del edil fuenlabreño, José Borras, ha manifestado que se encuentra tranquilo, pero cansado y que defiende su inocencia.
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