El presidente regional, Ignacio González, niega que se trate de una medida de carácter “recaudatorio” y la califica como algo “disuasorio”, ya que tiene un “escaso impacto económico”.
Para González el objetivo es seguir fomentando el uso eficiente de los medicamentos, después de recordar la reducción del gasto farmacéutico impulsado por la reforma del listado de medicinas desde el Ejecutivo Central.
Este argumento, para la concejala de Salud, Consumo y Cooperación, de Fuenlabrada, Margarita Barrios, es “hipócrita”, ya que con esta medida no se puede seguir hablando de sanidad universal y gratuita. Barrios cree que hay otras salidas para atajar el gasto sanitario y que con esta decisión se produce “una agresión al derecho universal a la salud de todos los ciudadanos”, que afectará a los “más desfavorecidos”.
Desde Parla, el segundo teniente de alcalde, Pablo Sánchez, ha manifestado que no les sorprende la iniciativa, y ha criticado el doble pensamiento del gobierno regional al cuestionar acciones que se producen en Cataluña, como el copago sanitario o la reclamación de ingresos al Estado, al mismo tiempo que imitan esas actitudes en la Comunidad de Madrid.
Otros ayuntamientos, como Getafe o Leganés, gobernados por el PP, no se han manifestado al respecto hasta el momento.
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