La rescisión del contrato supone dejar de abonar los 2.000 euros mensuales que costaba mantener el vehículo, idéntico al que utiliza el presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, por lo que fue bautizado como ‘Sarkomovil’.
Este ahorro se destinará a dotar a la delegaciones que lo requieran de vehículos utilitarios o especializados para que puedan seguir prestando servicio a los ciudadanos, según ha dicho el alcalde, Jesús Gómez.
Además, ha señalado que tanto en tiempos de bonanza y, más aún, en los que corren, hay que ser extremadamente respetuoso con el dinero de los ciudadanos.
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