La cuidadoras latinoamericanas pueden sufrir más problemas de salud debido a su trabajo según un estudio de la URJC.
El 23% ejerce de cuidadora en más de un hogar, el 30% tiene menos de dos días libres a la semana, el 40% trabaja más de 50 horas semanales; el 68% ni siquiera tiene contrato y el 99% realiza tareas domésticas en la casa donde además cuida a una persona dependiente.
Son las cifras de una encuesta realizada por la Universidad Rey Juan Carlos a cerca de medio millar de mujeres latinoamericanas de entre 26 y 45 años, con hijos, y dedicadas al cuidado no profesional de personas dependientes.
Su estudio, titulado “Cadenas de cuidado global: impacto en la salud de la s mujeres inmigrantes iberoamericanas residentes en la Comunidad de Madrid” ha contado con el apoyo del Centro de Orientación Sociolaboral para Mujeres Inmigrantes y, con él vienen a investigar los efectos que tiene sobre la salud de las mujeres cuidadoras su propia actividad.
Son, sostienen los investigadores, especialmente negativas para ellas en dos aspectos: el del sueño y el ejercicio físico. Detectándose un falta de ambas prácticas saludables. Más del 54% de las encuestadas reconoce no hacer ejercicio, mientras que el 88% reconoce dormir menos de seis horas al día.
Y es que, según los, autores del estudio, estas mujeres son “triplemente cuidadoras”. Cuidadoras de aquellas personas para las que trabajan, cuidadoras de su propia familia en España y cuidadoras de aquella que dejaron en su país de origen y a la que siguen enviando dinero.
Con este estudio, además, se ha querido aportar conocimientos que permitan corregir esta situación y mejorar la salud de las mujeres cuidadoras iberoamericanas, pero también, profundizar en los estudios del proceso migratorio y tirar a bajo algunos estereotipos relacionados con el rol del cuidador.
Comentarios