El pliego de condiciones del Ayuntamiento de Leganés establecía la obligatoriedad de subrogar a todos los trabajadores de varias empresas en el contrato único que se iba a crear. La adjudicataria, Valoriza, no lo hizo con tres trabajadores, dos de Helechos y uno de Suma 2000, anteriores concesionarias.
Los tres empleados denunciaron y el juicio se celebró en abril y mayo en los dos primeros casos y el 8 de julio en el último caso. Los dos primeros ya tienen sentencia, que obliga a la empresa a reincorporarles o indemnizarles como si fuera un despido improcedente.
Los trabajadores recuerdan además la carta que envió la concesionaria amenazando de posibles futuros despidos y recortes en el servicio en Leganés.
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