Los hechos ocurrieron el pasado 1 de diciembre cuando agentes del SEPRONA, de la Guardia Civil, localizaron este cargamento de animales en el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas. Cuando comprobaron la documentación, encontraron que la edad declarada de los cachorros no correspondía con la real, ya que tenían menos de tres meses y con esa edad se prohíbe el transporte en la Comunidad Europea. Esto se debe, según el teniente Marcos Santos, a que se pretenden evitar problemas sanitarios como la rabia con estos transportes.
Ahora la Guardia Civil en colaboración con la Comunidad de Madrid se hace cargo de los perros para posteriormente sacarlos a la venta por los cauces legales establecidos.
Desde Guardia Civil alertan además de que en Navidades se suelen producir este tipo de delitos con más frecuencia, debido a las fiestas, y pide a los propietarios que controlen la documentación de sus mascotas y que se conciencien de que necesitan toda nuestra atención.
Comentarios