Toda la presentación de la candidatura ha girado en la importancia que Sara Hernández da a la militancia, asegurando que ella sólo es “un portavoz”, que tendrá el discurso que le dicte la militancia.
A las bases consultarán cuestiones básicas como la política fiscal. Y en esa idea ha basado el único ataque que ha lanzado contra su contrincante Juan Segovia cuando se le ha preguntado si es ella la candidata oficialista.
Hernández se refería al apoyo que Felipe González y Rodríguez Zapatero ya han dado públicamente a Segovia. Con estas líneas maestras, Hernández quiere cambiar al PSOE de Madrid para que, según ha dicho, vuelva a ser la referencia de la izquierda en Madrid.
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