El PSM sostiene que dichas adjudicaciones “se trocearon ilegalmente para convertirse en más de 600 contratos menores, y escapar así del control parlamentario y de la fiscalización administrativa”, y añaden que fueron repartidos “a dedo”. Los socialistas se basan en datos de la Intervención general del Estado para hablar “decenas” de actos institucionales organizados por empresas supuestamente vinculadas a Gürtel, como la colocación de primeras piedras de hospitales o colegios o los actos de homenaje a las víctimas del 11-M. Según el líder del PSM, Tomás Gómez, su partido le ha pedido al PP lo que los populares “le han negado al juzgado”.
El Partido Socialista de Madrid asegura que en 657 de los 686 contratos se han encontrado “irregularidades”. Asimismo han recordado que en mayo su partido ya registró varias iniciativas en este mismo sentido, pero aún no han sido contestadas por el presidente autonómico.
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