Con los votos favorables de PSOE e Izquierda Unida el ayuntamiento de Fuenlabrada ha criticado duramente la gestión medioambiental de la Comunidad de Madrid. Los populares defendieron esa misma labor destacando las labores de sellado y restauración de los vertederos de inertes, o la firma de convenios para la gestión de residuos con la Federación Madrileña de Municipios. Además cargaron contra el Ministerio de Medio ambiente por el retraso de sus planes hidrológicos.
Desde las filas socialistas y de Izquierda Unida se pidió la firma de convenios con los sistemas integrados de gestión para el reciclado de aparatos electrónicos y pilas, que se vigilen los residuos procedentes de la construcción y planes de calidad del aire supramunicipales. Se hizo especial hincapié en el “Plan Depura”, firmado hace 5 años con el objetivo de dotar de agua reciclada a los municipios para el riego de zonas verdes, y que aún no está en funcionamiento.
El Plan de residuos sólidos urbanos fue otro de los centros de la polémica, ya que según el alcalde fuenlabreño, la intención de la Comunidad de Madrid era encarecer la gestión de cada tonelada de basura de los 12 euros actuales hasta más de 80. Asimismo se insistió en el previsto “fracaso” de las mancomunidades de municipios para las economías locales.
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