La instalación de las cámaras y la puesta en marcha del sistema ha tenido un coste cercano a los 1,2 millones de euros, que han sido financiados a través del ‘Plan E’.
De este modo, la práctica totalidad de la ciudad queda cubierta por una red de cámaras de vigilancia, situadas especialmente en puntos conflictivos de tráfico como los accesos y las salidas, parques, edificios municipales y vías con alta ocupación de tráfico rodado.
En alcalde de Parla, José María Fraile, ha destacado que el objetivo primordial de las cámaras es convertirse en una herramienta que permita mejorar la seguridad de la ciudad y reducir el tiempo de respuesta de los efectivos, ya sean de Policía Local, Policía Nacional o Guardia Civil, de los que ha destacado la buena coordinación que demuestran en el municipio.
Junto a la instalación de las cámaras se ha afrontado también la instalación de fibra óptica en varios edificios municipales y la formación necesaria para que los agentes de policía encargados del Centro de Control de Pantallas puedan desempeñar su función.
Por último, han destacado que en los meses en los que el sistema ha estado funcionando en modo de prueba se ha detectado un recorte en el tiempo de respuesta ante accidentes de coche, atascos u otros incidentes.
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