Sin pronunciarse en concreto sobre la reforma de Gallardón, el Obispo de Getafe ha puesto el acento al ser preguntado por este asunto, en calificar el aborto como un “drama que ninguna mujer quiere, es amargo y duro” y en eso, afirma, hay coincidencia “independientemente de la ideología”.
Asegura “pueden darse circunstancias graves, como estar sola, sin apoyo familiar, de pareja o cuando está en riesgo su situación laboral” que hacen a la mujer plantearse el aborto, por eso dice, hay que apoyar al máximo a la futura madre, con medidas que faciliten su contratación y apoyos sociales.
Joaquín María López de Andújar afirma tajante que nada justifica “nunca acabar con la vida de un ser humano”. El feto es la primera víctima, dice, y la segunda, la mujer que queda muy marcada y con “sentimiento de culpa”.
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