Se trata de cuatro de los últimos despedidos del Ayuntamiento cuyos casos aún estaban judicializados. El Supremo decidía el día 20 sobre si ratificar la decisión del TSJM de condenar a la readmisión al Ayuntamiento, y un día antes la Junta de Gobierno trató la posibilidad de retirar el recurso.
La propia alcaldesa ha señalado que lo propuso “pensando no sólo en lo injusto que fue el procedimiento cuando se inició sino además contemplando la posibilidad de que el Ayuntamiento fuera condenado en costas”, pero que no consiguió el apoyo del resto.
Según Pablo Sánchez, portavoz socialista, resultaba “un agravio comparativo con respecto a otros trabajadores que han pasado por el mismo proceso”. Además Sánchez ha señalado que la retirada del recurso requiere de la “proactividad” del gobierno para parar una decisión, la de recurrir ante el Supremo, “que ya se había tomado por el ayuntamiento mucho antes”.
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