El pasado viernes 13 de enero el alcalde de Leganés, Jesús Gómez, junto con la concejal de Nuevas Tecnologías y el director de Informática contra el que se centran las críticas socialistas, anunciaron que si el grupo de la oposición no se retractaba de sus palabras, presentarían una querella contra ellos por calumnias.
Las disculpas no han llegado este martes, fecha límite, y el equipo de gobierno ha anunciado la interposición de dicha querella. El gobierno achaca los intentos de acceder al ordenador socialista a un “virus informático presente desde 2009”, época de gobierno socialista, que ya “ha sido acotado en sólo seis meses”. Al margen de esta querella, el alcalde formuló el pasado lunes una denuncia ante Unidad de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil “en aras de la máxima transparencia y con el objetivo de disipar el mínimo atisbo de duda acerca de la actuación del equipo de gobierno municipal”.
Mientras tanto, el portavoz socialista, Rafael Gómez Montoya, niega haber acusado a alguien y afirma que sólo han puesto también este martes los hechos en conocimiento de la Justicia para su esclarecimiento. Insiste en que el director de Informática se extralimita en sus funciones al tener acceso a todos los equipos municipales (sin ser funcionario), extremo que niegan desde el Ayuntamiento.
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