Los trabajadores de la seguridad de la sede de la empresa en Madrid, en el polígono de Las Mercedes, han impedido la entrada a miembros del campamento que continúa en Fuenlabrada y que, aunque no estén en sus puestos de trabajo, siguen siendo representantes sindicales de los empleados.
Por eso Juan Carlos Asenjo, portavoz del campamento, ha señalado que vuelven a “despreciar” la legalidad y a hacer caso omiso a la sentencia de la Audiencia Nacional que obliga a reabrir Fuenlabrada y reincorporar a los trabajadores.
Con todo la decisión final del Supremo sobre el ERE todavía tendrá que esperar, ya que está prevista para el próximo 15 de abril.
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