Las aulas están ubicadas en el barrio de La Fuente. El objetivo de este programa es que los jóvenes tengan unos conocimientos académicos básicos y unas nociones profesionales que les ayuden a integrarse en el mundo laboral, a pesar de que hayan abandonado la enseñanza reglada.
En virtud del acuerdo firmado, el Ayuntamiento fuenlabreño, aporta los locales, un docente, se hace cargo del mantenimiento y facilita el uso de otros servicios municipales. La Comunidad de Madrid por su parte, dota a las aulas de equipamientos, aporta cuatro maestros de primaria, dos profesores de formación profesional y asume los gastos del funcionamiento pedagógico.
Isidoro Ortega, concejal de Educación de Fuenlabrada, recuerda la importancia de apoyar a estos jóvenes para mejorar su formación y evitar que se conviertan en población marginal.
Ortega cree que se debería disponer de más plazas docentes para cubrir las necesidades detectadas y ha resaltado la labor de los profesores “con los que los alumnos establecen verdaderos lazos afectivos”.
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