Los voluntarios, durante varias noches a la semana, llaman a la puerta de las personas mayores que tienen asignados para comprobar que se encuentran en buenas condiciones.
En caso de que el voluntario no obtenga respuesta se encargan de avisar a la familia inmediatamente a través de un número de teléfono que está registrado en su ficha.
Se trata de un servicio gratuito cuyo objetivo es mejorar la atención prestada a las personas mayores que viven solas.
Para formar parte de este programa, los interesados deben ponerse en contacto con la agrupación municipal de voluntariado social.
Comentarios