Se trata de un experto grupo en butrones que accedía a los locales, especialmente estancos, a través de los cuartos de contadores, de máquinas o del foso de ascensores de locales anexos. Entre el material intervenido por los agentes está un puntal hidráulico con diez toneladas de presión, inhibidores de frecuencia e intercomunicadores. Además se han recuperado mil cajetillas de tabaco y tarjetas de prepago de teléfonos móviles.
Entre los golpes que han sido comprobados y atribuidos a este grupo está el de un estanco de Alcalá de Henares o una tienda de telefonía móvil de Móstoles, donde fueron detenidos “in fraganti” tres personas en abril que dieron lugar al comienzo de la investigación. Así se ha descubierto que el grupo vendía la mercancía robada a una familia que posteriormente la distribuía entre comercios regentados por compatriotas.
Un portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid ha explicado que se han producido hasta nueve registros en viviendas de la capital, Getafe, Fuenlabrada y Parla, y como consecuencia han sido detenidas un total de 13 personas.
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