Una decena de bailarines profesionales interpretaron tangos argentinos y de fusión, rock acrobático, swing y bailes de salón mientras que la compañía de Tony Escartín representó su espectáculo “Salsa café”.
El público disfrutó durante tres horas, no sólo como espectadores, sino bailando en el coso taurino convertido en un improvisado escenario para seguir los ritmos de los profesionales al son de la salsa o la bachata.
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