Los concentrados han lanzado gritos como: ‘Vecinos, solidaridad’, ‘No nos mires, únete’, ‘Qué pasa, que pasa, que no tenemos casa’ o ‘Mañana puedes ser tu’.
Tras negociar durante unos minutos con la comisión judicial, han conseguido un aplazamiento de un mes, lo que ha agradecido Abdul Arayim, su mujer y sus tres hijos de 11, 5 y 4 años, la familia que no puede hacer frente a la hipoteca.
Abdul ha asegurado que no encuentra trabajo y que hace tres años intentó entregar sin éxito el piso al banco porque no podía pagarlo.
Le reclaman más de 200.000 euros y no tiene donde ir, con unos ingresos que no llegan a los 300 euros.
Desde la plataforma de Afectados por la Hipoteca han señalado que tras el aplazamiento intentarán abrir vías de negociación para que no se queden en la calle.
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