Un hijo y hermano de los fallecidos fue quien alertó a la Policía de que llevaba todo el día intentando localizar a sus familiares.
Cuando los agentes consiguieron entrar en la vivienda donde residían, con la ayuda de los bomberos, encontraron en el pasillo el cadáver de la mujer, Isabel, y tumbado en la cama, el de su hijo, Santiago, ambos con heridas de arma blanca. Un cuchillo con manchas de sangre estaba al lado del hombre.
Según contó su hermano, Santiago padecía una enfermedad mental desde hacía tiempo y acudía regularmente a un centro psiquiátrico.
De las primeras investigaciones, todo parece indicar que Santiago apuñaló a su madre y luego se quitó la vida aunque habrá que esperar a los resultados de la autopsia.
Uno de los vecinos ha asegurado que el comportamiento de la madre y el hijo, que durante algunas temporadas no vivía con ella, ha sido siempre normal y que cuando hablaba con él no notaba que tuviera problemas psiquiátricos.
Hasta el lugar, en la calle Ampurdán del barrio de Zarzaquemada, han acudido especialistas de la Policía Científica para la inspección ocular y de las investigaciones se ha hecho cargo el grupo VI de la Brigada Provincia de la Policía Judicial. El juez de Guardia dio la orden del levantamiento de los cuerpos a las cuatro de la madrugada.
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