A hora y media de la capital de España encontramos Cuenca. Se llega muy bien por la A-40 a través o bien de la carretera de Andalucía o de la de Valencia. Y para descubrir o redescubrir esta ciudad estamos en contacto con Nieves Mohorte, que es gerente en funciones de la Fundación Turismo Cuenca y concejala de Turismo en el Ayuntamiento.
A primera hora nos propone pasear por el puente de San Pablo, ver las casas colgadas y los túneles y refugios restaurados recientemente. Para descansar del paseo, Mohorte nos propone una visita a los museos de la Semana Santa, el Provincial, el de las Ciencias y el de Arte Abstracto. Y para quien quiera extender la visita, puede visitar las tres comarcas naturales de la zona, Sierra, Mancha y Alcarria, con naturaleza, bodegas y yacimientos arqueológicos respectivamente.
Para coger fuerzas, lo imprescindible es sentarse en un buen restaurante y pedir platos típicos, por mucho que no apetezca mucho con el calor: el morteruelo, con caza autóctona, el cordero asado o en caldereta, o el ajoarriero, un plato más fresco para esta época.
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