La jueza que lleva el caso desestimó las alegaciones de los abogados de la empresa y fijó para finales de septiembre de este año la fecha del juicio en la que los antiguos empelados de Uralita solicitarán indemnizaciones que oscilan entre 72.000 y 150.000 euros, según el grado de afectación de los 27 demandantes.
El presidente de la Asociación de Victimas del Amianto (Avida), Juan Carlos Paúl, manifestó a Cadena Ser Madrid Sur que el objetivo es que se reconozca que Uralita conociendo que los materiales que empleaba mataban a sus trabajadores permaneció su animo de lucro a la salud de estos por lo que solicitan que ese lucro revierta en sus antiguos empelados.
Según Paul, las cantidades que han pedido son bastante bajas porque lo que se pretende es demostrar un enriquecimiento ilegal ya que ni la salud ni la vida de los que han fallecido se va a recuperar y añadió que comparada con otras demandas que se han interpuesto en otros países suponen menos de un tercio.
El presidente de la Asociación señaló que desde los años 60 hasta finales de los noventa cuando cerró la fábrica de Getafe pasaron unos 25.000 trabajadores de los que se calcula que un 23 por ciento resultaron afectados por el amianto.
Los afectados consideran que la empresa no adoptó las medidas necesarias para proteger la salud de los trabajadores y sus familias mientras que en el resto de Europa sí se tomaban medidas para prohibir el uso del amianto tras haber sido reconocido por la comunidad científica como el detonante de diversos tipos de cáncer y de distintas enfermedades respiratorias.
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