Se trata de la “Operación Cabezatoro” que comenzaba el pasado 14 de marzo. La Guardia Civil recibía una denuncia del comercial de la nave ocupada ilegalmente en Arroyomolinos tras encontrar allí material que no pertenecía a su empresa, lo que daba paso a la fase de vigilancia. Según una portavoz de la Guardia Civil, cuando los agentes decidieron entrar en la nave descubrieron un taller ilegal de reparación de automóviles y un invernadero con 62 plantas de marihuana.
Los detenidos con tres varones vecinos de Parla, de origen búlgaro y con edades entre los 23 y los 49 años. Se les imputan delitos de usurpación de inmueble, defraudación de fluido eléctrico y contra la salud pública.
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