Juan Soler ha indicado que la finca tiene varias edificaciones pero que no sería posible derribarlas todas. Además, ha añadido que se incrementará la vigilancia con efectivos de la policía local, nacional y Guardia Civil para lo que ha pedido la colaboración de la Delegación del Gobierno en Madrid.
Según el alcalde, es responsabilidad de esta delegación impedir el menudeo de droga, además de evitar que se celebren más fiestas clandestinas.
También ha apuntado que los propietarios intentaron convertir la finca en una casa rural hace seis años aunque no llegaron a ningún acuerdo con el Ayuntamiento.
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