Menamobel distribuye desde Fuenlabrada para todo el territorio peninsular. “Es un proceso mucho más cómodo y se adapta al cliente” explica Ivana González, responsable de Menamobel, que subraya las ventajas que supone para el cliente, que, además, puede elegir el montaje o no de los productos.
Las posibles dudas que le surjan al comprador se resuelven con el envío de documentación, muestras de color y a través de un correo electrónico y un teléfono para la solución de dudas. “La vida evoluciona y se transforma, y esto es un ejemplo”, confirma González.
Menamobel dispone también de una exposición de más de 1000 m2 en la calle Móstoles de Fuenlabrada.
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