Rafael Gómez Montoya y Manuel Robles, que en su día asistieron al acto inaugural junto al consejero de Transportes Ignacio Echeverría, han denunciado 7 meses después la paralización de las obras. Fundamentalmente se pretendía sustituir tres rotondas por otros tantos pasos a distinto nivel, dado que los 50.000 vehículos que utilizaban la vía diariamente habían superado las previsiones iniciales de la M- 407.
Había un presupuesto de casi 20 millones de euros y un plazo de ejecución de 18 meses, pero la obra está paralizada. Gómez Montoya ha atribuido este retraso al “recorte” del presupuesto regional 2010 para transportes e infraestructuras, y según Robles, se debe a que la Comunidad de Madrid quería “obligar” a la empresa adjudicataria a realizar más trabajos de los previstos por el mismo importe.
Por su parte la asociación de vecinos de San Nicasio en Leganés ha reiterado su intención de presentar alegaciones al proyecto de la M-407 para que la última rotonda se haga bajo tierra y se eviten así problemas en el casco urbano cercano.
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