En total estos gastos, de los que se beneficiaron entidades vecinales, deportivas, culturales y sociales, ascendieron a 3.873.674,27 euros, de los cuales las subvenciones directas se llevaron más de 303.000 euros, mientras que el consumo de luz en los edificios requirió una inversión de 1,3 millones de euros, el agua contó con 1,7 millones de euros y el gas procuró facturas por valor de casi 380.000 euros.
Además el Ayuntamiento también se hizo cargo de los alquileres y recibos de la comunidad de aquellos locales ocupados por estas entidades, que en el primer concepto destinó 150.000 euros y en el caso de las comunidades más de 40.500 euros.
En este sentido el equipo de gobierno ha señalado que ya ha informado de la situación al resto de grupos municipales con representación en el Ayuntamiento para “estudiar la situación de forma conjunta para determinar qué medidas tomar”, aunque señala que en materia de subvenciones “el objetivo es primar a aquellas asociaciones que ofrezcan mayor rentabilidad social en su actividad”.
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