De la mayoría de municipios del sur de Madrid han desaparecido los vestigios franquistas del callejero. Es el caso por ejemplo de Getafe o Parla. Otros son casi residuales, como en Fuenlabrada con una galería comercial “18 de Julio”. Pero abundan más en otros como Leganés, donde permanecen calles dedicadas a General Aranda, teniente general Muslera o capitán Cortés, o en Pinto, donde podemos transitar por Capitán Cortés, Ruiz de Alda y Cuartel de Simancas.
Más ejemplos surgen en Ciempozuelos, con símbolos franquistas que se encuentran en la Iglesia de María Magdalena y en la Ermita del Consuelo, en Valdemoro con la calle Ruiz de Alda, y en Griñón con la calle Carlos Ruiz, que sin embargo va a ser ya sustituida por la calle Adolfo Suárez.
Y aunque algunos pueblos han borrado esos nombres, lo cierto es que han permanecido durante gran parte de la democracia. En Torrejón de Velasco fue un gobierno del PP, en 2010, el que cambió situaciones curiosas, como que la avenida de la Constitución desembocase en la calle del Generalísimo, paralela a la de José Antonio y cercana a generales como Mola o Sanjurjo. Ahora ya lucen alcaldes y presidentes democráticos en sustitución del callejero de antaño.
Pero el sur de Madrid nos depara una sorpresa en Cubas de la Sagra: el cementerio guarda entre las tumbas dos monolitos de piedra en los que se rinde homenaje a los alemanes, nazis, caídos durante la contienda civil española.
Comentarios
jose luis gil dice:
Que ocurre que todos en la actualidad tenemos que ser rojos. Cuando se desarrrollo la guerrra eramos todos nacionales.
Es igual que si la puerta de Alcalá dedicada a Carlos iii la quitamos del medio.
no digamos de quitar la cruz del Valle de los Caidos.
Hasta muerto le tienen miedo-
Será mejor personajes como José Sacristan ,,Baltasar Garzón, o la mamá de ciertos actores comunistas de pro.
Resumiendo tenemos todos que ser de derechos y olvidar los muertos que causaron la izquierda
miércoles, 02 de abril de 2014 a las 20:37