Los técnicos sanitarios se adelantan a su profesionalización obligatoria a través de unos cursos en Fuenlabrada
Su formación se limitaba a cursos de unas 40 horas en organizaciones como Cruz Roja o Protección Civil, el resto lo hacía la experiencia. La profesión de técnicos en emergencias sanitarias se encontraba en un limbo profesional a medio camino entre la enfermería y la conducción de las ambulancias.
A partir de un Real Decreto, aprobado este mismo año, las Comunidades Autónomas tendrán que regular su formación, equiparándola a los grados de FP. Ahora, todos aquellos técnicos que no acumulen más de 2.000 horas de experiencia tendrán que complementar su currículum con cursos homologados hasta sumar 615 horas teóricas.
Cursos como el que se ha celebrado este fin de semana en el Centro de Iniciativas para la Formación y el Empleo de Fuenlabrada y que ha supuesto el primer Congreso nacional de Técnicos en Emergencias Sanitarias.
Organizado por UTESMAD, la unión de este colectivo en Madrid, los cursos ofrecen 13 horas con la que los asistentes han ido adelantando trabajo en este proceso de profesionalización. Un proceso que, dice el presidente de UTESMAD, Oscar Pérez, servirá para dejar de considerar a este colectivo como simples “camilleros” y mejorar el trato al paciente.
El primer Congreso nacional de Técnicos en Emergencias Sanitarias ha contado con la presencia de la concejala de Salud en Fuenlabrada, Teresa Fernández, que, poniéndose en el lugar del paciente, ha valorado positivamente esta profesionalización.
Más allá del volante de la ambulancia, los técnicos en emergencias sanitarias están formados para la asistencia de pacientes en situaciones de riesgo, su inmovilización y tratamiento, la aplicación de técnicas básicas para su soporte vital, la clasificación y tipología de víctimas en situaciones extremas de catástrofe o la atención psicológica de víctimas y familiares.
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