Eran dos de las “bombas” que se encontraban los nuevos alcaldes socialistas de Leganés y Getafe pero que han sido solventadas en ambos casos por el momento. En Leganés hablamos de Sandra, una joven madre que ocupó ilegalmente un piso y a la que iba a desahuciar el banco sin negociación para poder pagar las cuotas. El PP le prometió hace unas semanas un piso de EMSULE, pero no había informe de Asuntos Sociales y no se podría tramitar.
Ahora, con el gobierno socialista, se mantiene que la afectada debe cumplir con los trámites legales para acceder a un piso municipal de emergencia social y cumplir con las condiciones, pero mientras tanto al menos se ha conseguido retrasar la ejecución del desalojo hasta septiembre.
En el caso de Getafe hablamos de Rubén, un padre de una niña que iba a ser también desahuciado esta semana. Es una situación similar: ocupa ilegalmente una vivienda pero paga la comunidad y se muestra dispuesto a negociar un alquiler social, pero el banco no lo admite y pide el desalojo. Sin embargo tras la mediación de la PAH y del propio Ayuntamiento, la alcaldesa Sara Hernández se ha comprometido a darle una alternativa habitacional para, en el caso de que se ejecute el desalojo, pueda entrar a vivir inmediatamente en otro piso.
Comentarios