Ya van cuatro noches encerrados en las dependencias del hospital leganense y tras numerosos apoyos, la decena de afectados y familiares encerrados asegura que mantendrá el encierro hasta que tengan el medicamento en la mano, según Ramón Dorado, marido de una de las pacientes.
De momento están a la espera de una reunión de la gerencia del hospital Severo Ochoa con la Plataforma de Afectados, que mantiene que no se pueden permitir más muertes como la que aconteció en diciembre en el mismo centro, después de que el medicamento no pudiera vencer a una enfermedad ya en su fase terminal.
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