El dispositivo especial de vigilancia se mantendrá durante la primera quincena de octubre para prevenir la comisión de infracciones específicas de la normativa que regula los autobuses de transporte escolar lo que redundará en una mayor seguridad y tranquilidad para los padres de alumnos.
Policías locales de Leganés serán los encargados de vigilar los autobuses durante la realización de las distintas rutas escolares que transcurran por la ciudad y para ellos contarán con la colaboración de los centros escolares con el objetivo de interferir lo menos posible tanto en el horario de las clases como en el trayecto de los autobuses.
La concejala de Seguridad Ciudadana de Leganés, Laura Oliva, ha manifestado que no se trata de controles policiales que vayan a suponer un problema en las rutas.
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