A lo largo de toda la Navidad una urna junto al belén municipal recogía los donativos de todos los vecinos para dar una mayor ayuda al comedor Paquita Gallego, de la asociación Madre de la Alegría, que atiende a los más necesitados. Aunque según el alcalde Jesús Gómez aún no hay cifra oficial, los leganenses han vuelto a ser generosos en sus donativos.
Por su parte una de las voluntarias del comedor, Menchu Hermida, ha agradecido esta ayuda para pagar alimentos que cocinar a los más necesitados. De hecho ha asegurado que “se nota que los leganenses son cada vez más solidarios”.
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