Las mujeres pueden llegar a ser mejores ejecutivas en empresas de comunicación.
¿Qué puesto ocupa la mujer en la publicidad? ¿Por qué se aprecia una brecha digital en Internet que separa al público femenino del masculino? ¿Existe un freno tecnológico que obstaculice a las mujeres el acceso a las nuevas vías de comunicación?
Son preguntas que se han hecho estos días en la Universidad Rey Juan Carlos, en el marco de las II Jornadas sobre “Mujeres en Comunicación y Publicidad Digital”, que organiza la profesora de Comunicación, Patricia Corredor.
Y es que, a pesar del alto grado de abandono y merma de vocación entre este tipo de carreras universitarias, son muchas las empresas que apostado por incorporar mujeres a sus equipos directivos.
La consultora y escritora sobre nuevas tenologías Antonio Broglia, anima a las empresas a no poner trabas a la incorporación de mujeres y se remite a países europeos como Noruega, Dinamarca o Finlandia, donde las mujeres han podido desarrollar su talento en el mundo empresarial sin renunciar a su vida familiar.
No se trata de iniciativas de solidaridad, sino un mero ejercicio empresarial que, como todos, busca resultados. El talante empático de la mujer y su capacidad interactiva, a veces en situaciones que requieren tomar decisiones inmediatas, hacen de ellas grandes directivas en empresas que requieren llegar a públicos muy específicos.
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