La carta, que ha desvelado el grupo municipal de ULEG en Leganés, llega a cifrar en más de 200 las personas que en algunos fines de semana se han concentrado en el campus universitario para realizar botellones. Algo que ha derivado en más de una ocasión en actos vandálicos y desperfectos en el recinto universitario.
En dicha carta se dice que “la Policía Local no suele acudir a los requerimientos de nuestro personal de seguridad”, por lo que para solventar esta situación se informa al Ayuntamiento de que se van a adoptar “las medidas que ya hemos informado para evitar la realización de “botellones”. Es decir, cerrar la calle que cruza el recinto, como ya se hizo en otras ocasiones.
Desde la propia UC3M señalan que la intención de esta carta no era su difusión pública, sino que conteste el consistorio a los requerimientos. Desde el propio Ayuntamiento fuentes municipales indican que la seguridad de las universidades, por ley, es competencia de sus órganos y en ningún caso de los Ayuntamientos, mientras que recuerdan que el recinto universitario cruza una calle pública de Leganés que no se puede cerrar al paso, cosa que ya se aceptó cuando se instaló el centro.
Por último estas fuentes municipales indican que el alcalde se reunió con el rector hace meses y le propuso que desarrollaran un software para identificar las caras de los infractores, facilitando así el trabajo de Policía Local.
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