Cada paciente es mundo. Cada enfermo que llega al hospital con una dolencia puede derivar en patologías muy diversas y, a veces, inesperadas. Por eso, los médicos residentes de Medicina Interna tienen que tratar con varias hipótesis y resolver incógnitas antes de enunciar un diagnóstico.
Es una especialidad demasiado amplia que implica una constante comunicación y puesta en común de conocimientos por parte de los médicos residentes.
Por ello la Sociedad de Medicina Interna de Madrid y Castilla-La Mancha se reúne periódicamente para compartir casos problemáticos, generar un debate y llegar a una conclusión sobre cual es la mejor manera de tratar las diferentes patologías.
El Hospital de Fuenlabrada ha acogido la última sesión de internistas, donde, además, se ha elegido al presidente de la Sociedad para los dos próximos años, el doctor Antonio Zapatero, que recoge un cargo que ya ocupa dentro del Hospital de Fuenlabrada para ocuparse de la Medicina Interna en ambas comunidades.
Una responsabilidad que acepta en un momento en que, dice, se hace más necesaria que nunca la colaboración y la puesta en común de ideas debido a la creación de nuevos Hospitales y el gran número de médicos residentes en que realizan sus visitas en ellos.
La Sociedad de Medicina Interna Madrid – Castilla-La Mancha nació en 1986 dentro de la Sociedad Española de Medicina. Tras casi trece años compartiendo experiencias y diagnósticos cuenta, actualmente, con más 500 especialistas.
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