Según han arrojado las investigaciones policiales, esta banda acudía en la tarde noche al aparcamiento de este centro comercial de Leganés. Una vez allí, con su propio vehículo merodeaban buscando coches de una determinada marca y modelo para, aprovechando la ausencia de testigos y la escasa vigilancia, sustraer el catalizador.
Al menos 29 hechos delictivos cometieron antes de que las denuncias similares alertaran a los agentes policiales, que desde el mes de julio empezaron a seguirles la pista hasta que lograron su detención el pasado 24 de noviembre.
Según una portavoz policial, toda la operación de robo estaba perfectamente coordinada, aprovechando horarios en los que sabían que no había gente en el aparcamiento y podían actuar sin levantar sospechas.
Los catalizadores se han convertido en una pieza codiciada por los delincuentes debido a que en su fabricación se emplea platino, paladio y rodio, todos ellos metales muy escasos y que pueden alcanzar un precio elevado en el mercado negro.
Comentarios