Según la Policía Nacional las investigaciones arrancaron el pasado mes de octubre, cuando tuvieron conocimiento de un grupo dedicado al tráfico de estupefacientes que tenía un piso de Carabanchel como punto de conexión. Los 6 detenidos supuestamente cortaban la cocaína en un laboratorio situado en dicha vivienda, y también se encargaba de su distribución a pequeña y mediana escala, siendo ésta su única actividad profesional. Los agentes descubrieron que utilizaban un piso de Parla como almacén, donde se han incautado de 65 kilos de cocaína. Según una portavoz del cuerpo, el detonante de la operación fue un envío de dos kilos de droga entre ambos puntos.
Además de los 65 kilos incautados en el piso- almacén de Parla, la Policía encontró otros 4 kilos de cocaína en el laboratorio de Carabanchel. Asimismo, aparataje como básculas de precisión, batidoras, molinillos y productos químicos para tratar la droga.
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