Feng Mao reconoce que desde la instalación de empresas chinas en esta zona industrial, allá por los 90, hasta ahora, el Polígono Cobo Calleja no había pasado por una situación tan delicada.
En estos días la Asociación de Comerciantes de esta zona industrial se ha reunido con representantes de la Policía Nacional para pedir ayuda y frenar la oleada de robos, que afirman, se ha incrementado tras la Operación Emperador.
Mao dice en esta entrevista que, sabedores de que la comunidad china maneja dinero en metálico, han aumentado los robos e incluso hay quien se ha hecho pasar por policía y se ha valido de la dificultad con el idioma y el temor a la policía de estos ciudadanos, para sustraerles dinero.
A esto se suma, que tras la operación policial las ventas han bajado considerablemente, incluso hasta un 70% en algunas empresas.
Los agentes trasladaron a los comerciantes en la reunión, que el policía debe ir convenientemente identificada y se comprometieron a destinar más patrullas y policías de paisano al Cobo Calleja para garantizar la seguridad.
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