Sobre las diez de la mañana, los Agentes del sector de Tráfico de Madrid, que se encontraban realizando servicios de vigilancia de carretera, detectaban un automóvil que circulaba a gran velocidad por la M 301, a la altura del kilómetro 3, sentido Getafe. El coche, conducido por un varón de 32 años, iba a 234 kilómetros por hora.
Los agentes interceptaron el vehículo y detuvieron a su conductor, quien puede ser sancionado con una pena de prisión de tres a seis meses o una multa de seis a doce meses o bien con trabajos en beneficio de la Comunidad de 31 a 90 días. En cualquiera de los casos, el detenido tendría privación del derecho de conducir de uno a cuatro años.
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