Las investigaciones comenzaron cuando el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid tuvo conocimiento de la existencia de una organización que pudiera estar introduciendo sustancias estupefacientes, procedentes de Sudamérica.
Las pesquisas policiales permitieron esclarecer el método utilizado para la introducción de la cocaína, que consistía en la utilización de bananos machos, en cuyo interior se camuflaba la droga, para ser mezclados posteriormente con frutos normales en grandes contenedores de transporte.
Una vez recibida la cocaína en España, se transportaba a los diferentes puntos de distribución gracias a la utilización de dobles fondos en el interior de coches para dificultar su localización en caso de ser interceptados por la policía.
En una primera intervención policial se produjo la detención de 10 personas, entre los que se encontraba el líder de la banda, y la realización de varios registros domiciliarios. Un portavoz del Instituto Armado ha detallado que en una segunda intervención se arrestó al resto de la banda y se descubrió un laboratorio clandestino para la adulteración y posterior distribución de droga.
La ‘Operación Dilios’ se ha saldado con la intervención de más de 30 kilos de cocaína, dos de hachís, 30 de tetracaína y fenacetina utilizadas en el corte de la cocaína, 190.000 euros, siete vehículos de alta gama y diverso material de laboratorio. A ello se suma la detención de 17 personas con nacionalidad española, colombiana y rumana.
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