Según el gobierno regional, las 179 plazas a las que hace referencia el contrato autorizado están dirigidas a personas de 18 a 65 años, con enfermedades mentales graves y duraderas con deterioros o discapacidades en su funcionamiento psicosocial que les dificulte vivir de un modo independiente.
El contrato se tramita por procedimiento abierto con pluralidad de criterios, y se tendrá en cuenta, entre otros aspectos, la oferta económica así como la oferta de un programa de vacaciones de al menos una semana con viaje y estancia gratuita en un lugar turístico.
Entre las modalidades de atención está la de residencias, destinadas a los enfermos dependientes que requieren de supervisión total. También hay pisos supervisados para personas con dificultades para cubrir autónomamente sus necesidades, mientras que los centros de rehabilitación psicosocial son para los madrileños con dificultades en su funcionamiento e integración.
Comentarios