La Comunidad de Madrid arreglará de forma integral el módulo del colegio de La Cañada.
Alrededor de la misma mesa la delegación de educación de Fuenlabrada, con Carmen Bonilla a la cabeza, y la Dirección General de Infraestructuras de la consejería de Educación. El Objetivo del encuentro es encontrar una solución integral y definitiva a los defectos de construcción del aulario de educación infantil, que han provocado que 150 niños de 5 años hayan tenido que ser desplazados en su día a día a aulas comunes y un colegio vecino, el Dulce Chacón.
Estas demandas no son nuevas, y es que el 13 de octubre se produjo una reunión entre la Dirección Territorial de Educación Madrid Sur, Ayuntamiento y padres afectados tras la tercera inundación que sufrió el módulo en sus tres años de vida. De dicho encuentro salió el compromiso regional de arreglar la cubierta, y días después se sumó el arreglo de la calefacción. De hecho, los trabajos previos a las obras comenzaron el pasado lunes 19 de octubre, pero tanto la concejalía de educación como los padres quieren extender el arreglo al resto de defectos del aulario como fontanería, electricidad o cerrajería.
Ante la incertidumbre por la situación de las obras se creó una comisión de seguimiento formada por el Consistorio y la Asociación de Madres y Padres de Alumnos. En función de la respuesta dada por la Comunidad de Madrid, no cierran la puerta a futuras movilizaciones y afirman que se “tomarán las medidas que se estimen oportunas” para acabar con lo que han calificado como “indeseable situación de deficiencias”.
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