Los propios vecinos de la zona habían pedido medidas al Ayuntamiento para evitar que se produjeran más atropellos en la avenida Manuel Azaña tras los producidos en octubre. Alrededor de un mes después ya están instalados semáforos y pasos de peatones. Asimismo desde la delegación de Seguridad Ciudadana su responsable José Luis Casarrubios ha indicado que se ha incorporado un radar móvil para controlar la velocidad, y ha recordado que doblar la velocidad permitida puede suponer penas de prisión. Asimismo ha indicado que los semáforos instalados son “inteligentes” y se cierran si se supera la velocidad permitida.
Casarrubios ha añadido que “desde hace tiempo” la Policía Local había “auditado” esta zona de la ciudad y había transmitido la necesidad de mejorar su seguridad vial. Por este motivo, y antes de poder instalar los semáforos y pasos de cebra, ya se realizaban controles de velocidad mediante radar móvil.
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