La “au pair” conducía el metro siniestrado en las cocheras de Loranca en 2012
La Magistrada ha llegado a esta conclusión tras interrogar a Rosa María S., la esposa del fallecido y a los empleados de la compañía que ese día estaban de guardia, así como tras visionar las cámaras de seguridad de las instalaciones.
El accidente tuvo lugar el 7 de agosto de 2012 en las cocheras del metro de Loranca, en Fuenlabrada, alrededor de las siete de la tarde. Entonces José Manuel Pérez García se acercó a las instalaciones y pidió permiso al jefe de depósito y responsable de la instalación para coger un convoy. Al ser mando intermedio de la compañía, Pérez estaba capacitado para acceder al mismo y por eso no se le puso ningún impedimento.
Lo que no sabía el jefe de depósito es que iba acompañado de su mujer e hijo y de la “au pair” que estaba con ellos. La joven belga, había llegado a España a aprender el idioma y esa tarde se sentó a los mandos del convoy para conducirlo, según le propuso Pérez. Así lo ha relatado la esposa del fallecido, quien no ha sabido precisar el tiempo que la menor estuvo a los mandos,aunque ha reconocido que “no se alarmaron en ningún momento, ni su marido dio ninguna alerta, ya que no se esperaba la colisión final”. El convoy lo conducía por una vía de pruebas de unos 800 metros de largo.
La joven belga recibió la peor parte al estar sentada en el puesto del conductor. La colisión se produjo a una velocidad de 50 kilómetros por hora contra el talud situado al final de la vía.
El Secretario General de UGT Metro, Teo Piñuela, ha mostrado su respeto por la decisión judicial y ha recordado que su sindicato siempre resaltó que no se respetó la normativa.
El auto judicial concluye que “existe una negligencia que se estima grave por parte de Pérez García, al permitir no sólo el acceso de personas no autorizadas a la vía de pruebas” sino también por permitir la conducción de “una menor, aun cuando fuera bajo su supervisión”.
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